Hoy hace dos años…

Recién operada de la rodilla, frustrada por la lenta recuperación que no iba a ser tan lenta, sola en casa por la jornada laboral de Papá Fúturo… Y llena de instinto maternal, saqué de la manga este pequeño desahogo, un rincón mío y para mí donde relatar, narrar y experimentar mi mundo maternal.

No sabía si llegaría muy lejos, al fin y al cabo lo he creado para llorar mis penas al no poder satisfacer todavía mi incesante deseo de ser madre, pero con muchas ganas de aprender y enseñar lo que voy aprendiendo. De recapitular las cosas que la maternidad nos ofrece.

Desde entonces ha ocurrido mi embarazo y mi parto… No os voy a contar lo que podéis leer en las líneas que hay por aquí hasta ahora.

Ayer iba a celebrarlo a lo grande yendo al Madresfera Bloggers Day y aprender un montón para sacarle más partido al blog… Pero me quedo con que Bebé Fúturo se ha recuperado ya por fin genial de todos sus malestares y que durmió una siesta de 4 horas seguidas que he aprovechado un poquito (para quitarme la mala leche de encima, por lo menos).

Pero la cosa no queda ahí… Mañana comienza un sorteo que realizo para celebrarlo y, no sé si os habéis dado cuenta, ¡he cambiado la imagen de mi rincón! ¿Os gusta?

También quiero hacer de este rincón algo más que el narrar nuestro día a día y empezar a enseñar las cosas que uso o dejo de usar. Quiero que no sólo sea mi rincón, si no también el vuestro para sentiros a gusto y veniros a tomar un té o un café a mi lado.